¿Porqué dejaste al tiempo que robara
los nidos de los pájaros de tu alma,
el columpio en el árbol de manzanas
sembrado en el edén de tu mirada,
Las gotas de ternura en tus pestañas,
los pétalos carmín de tu deseo,
el amable rumor de tus palabras,
el pudor y la prisa de tus besos?
¿Porqué dejaste entrar a la rutina,
maullar a los gatos de los celos
y ladrar a los perros de la duda?
¿Porqué nuestro amor se fue a la ruina
y en todos los rincones de mi cuerpo
no queda rastro de tu piel desnuda?
* * *
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DE MI SOLEADA SOLEDAD
Aburrimiento mudo, solitario, minucioso tic-tac rondan mis pensamientos intangibles. El pulso de la urbe, la z...

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Solo soy un orfebre de palabras aprendiz de alfarero de una idea cazador de poemas transparentes. Solo soy escultor de una hoja...
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Perfumado y amargo el beso que respiro. Mortal, intimo, voluptuoso en el rastro entra en mi cuerpo ahoga mi garganta. Infiltrado en las vena...
¡Maravilloso! simplemente maravilloso
ResponderEliminarMe encantó tu poema, me llegó al alma. Te comento desde el sentimiento que es lo que me mueve a seguir leyendo y escribiendo, ya que no tengo una formación académica.
ResponderEliminarCuánto dolor se siente en cada verso, cuanta tristeza y desilusión. Realmente conmovedor.
Besitos de Luz, Larisa, arriba Amiga, sigue escribiendo que me fascinas.
Elena.